Claves de la nueva NOM-017 en seguridad laboral
En 2025, México actualizó la NOM-017, una norma crucial para la seguridad y salud en el trabajo, que regula el uso de equipos de protección personal (EPP) en los centros laborales. Esta nueva versión de la norma busca ofrecer mayores garantías para los trabajadores frente a los riesgos de los ambientes laborales, al establecer medidas más estrictas y claras en la clasificación de peligros y en el manejo de equipos de protección.
Entre los cambios más destacados se halla una clasificación más minuciosa de los riesgos en el entorno laboral, incorporando no solo los riesgos mecánicos y físicos, sino también los riesgos biológicos, químicos y eléctricos. Esto facilita una detección más exacta de los peligros vinculados a cada función laboral, y exige a las compañías mantener esta información al día regularmente, sobre todo si se modifican los procesos o el equipamiento.
Además, la nueva norma establece nuevas reglas para el uso y manejo de los equipos de protección personal. Se exige que las empresas implementen procedimientos específicos para la descontaminación de ropa protectora que haya estado en contacto con sustancias peligrosas. Asimismo, se añade la obligación de destruir o manejar de manera especial los equipos de protección que estén dañados o que hayan llegado al final de su vida útil, para evitar su reutilización y los riesgos que ello podría implicar.
El método también cubre a los empleados de compañías externas contratadas para servicios específicos. Se requiere que estos empleados obtengan el mismo entrenamiento en seguridad en el trabajo y que se les faciliten los equipos de protección requeridos, de la misma manera que a los trabajadores permanentes. Esta acción garantiza que los contratistas tengan la misma protección en su lugar de trabajo.
Una de las principales características de la reciente legislación es el minucioso registro de los EPP. Estos deben someterse a revisión, mantenimiento y, si es preciso, sustitución. Asimismo, se establece la obligación de documentar la distribución y reposición de artículos desechables, como guantes y mascarillas, en actividades con riesgo de contacto con sustancias peligrosas. Este registro debe ser detallado y de fácil acceso.
En cambio, se establece una nueva condición para los visitantes que acceden a zonas donde es obligatorio llevar EPP. Estos tienen que seguir las mismas reglas que el personal, asegurando de este modo que no ocurran accidentes ni se produzcan exposiciones a peligros. Esto abarca desde suministradores hasta revisores o auditores, quienes, debido a su ingreso a zonas de peligro, deben estar también resguardados.
La certificación de los equipos también se ha reforzado. Ahora, la norma exige que los equipos de protección personal adquiridos por las empresas cuenten con una certificación válida emitida por organismos acreditados, lo que asegura que los equipos cumplen con los estándares de seguridad requeridos. En caso de que no existan normas específicas para un determinado equipo, se deberán cumplir con las Normas Mexicanas o, en su defecto, con las regulaciones internacionales de seguridad.
Finalmente, la reciente edición de la NOM-017 comenzará a aplicarse seis meses después de su divulgación formal, lo cual permitirá a las compañías ajustarse a los nuevos requerimientos. Durante este lapso de transición, la normativa anterior continuará en uso.
Esta actualización refleja el compromiso de México por mejorar las condiciones laborales y garantizar un entorno seguro para los trabajadores, minimizando los riesgos y mejorando la calidad de vida en los espacios de trabajo.